La Asociación Cultural Paco Abadal nos ha hecho llegar la historia de la familia Abadal y su relación con la Casa Milà, ya que fueron los primeros inquilinos.

Francisco Serramalera Abadal (después Abadal Serramalera), conocido como Paco Abadal, nació en Manresa el 28 de julio de 1875; al poco tiempo, sin embargo, su familia se trasladó a Barcelona, donde residió en varios domicilios del nuevo barrio, el Ensanche.

Durante sus estudios universitarios se interesó por el ciclismo, deporte en el que llegó a ser un profesional de reconocido prestigio en el cambio de siglo.

Gracias a esta afición se hizo con una pequeña fortuna que en 1902 utilizó para abrir un taller de reparación, mantenimiento, custodia y venta de bicicletas, motocicletas y automóviles, el mítico Auto-Garage Central, en la calle Consejo de Ciento Barcelona, que luego se trasladó a la calle Aragón y que posteriormente sería ampliado con otros locales en la calle Sepúlveda, plaza Letamendi y la carretera de Sarriá.

Paralelamente a su actividad comercial e industrial, siguió practicando y compitiendo en el ciclismo y posteriormente en el motociclismo y el automovilismo, deportes en los que también consiguió numerosos trofeos.

En esta época entró en contacto con el pintor modernista Ramón Casas -otro entusiasta de los coches-, al que encargó un cartel para anunciar su Auto-Garage Central. Más adelante haría los retratos de su mujer, de sus hijos y de él mismo. De Casas también recibió como obsequio el famoso cuadro Comienzos del Siglo XX, que había adornado las paredes de la cervecería Els Quatre Gats y que pasó a decorar las paredes de su local de la plaza Letamendi.

En octubre de 1912 Francisco Abadal se casó con Mercedes Durán, hija del acaudalado comerciante e industrial catalán, Joaquim Durán Albert y Mª Luisa Clarà. Estos últimos fijaron su residencia piso segundo de la planta tercera de la escalera del Paseo de Gracia, que se acababa de construir ese mismo año.

Joaquín Durán Albert, comerciante e industrial catalán, conocía a Pedro Milà seguramente porque habían coincidido en la Junta de la Liga de Defensa Industrial y Comercial de Barcelona, asociación de comerciantes y pequeños industriales.

La referencia de la boda y de la nueva residencia de la pareja se puede leer en una noticia publicada en El Mundo Deportivo del 10 de octubre de 1912: «Con motivo de super boda, los novios han recibido muchos y valiosos regalos, entre los que figuran los de los padrinos de boda señores don Adolfo Solá Sert, don Pedro Homet, don Francisco de P. Cantareil y don Francisco Laporta, consistentes en: una soberbia carpeta de Smirna, hermosas lámparas, un pendanlif de platino y brillantes y un brazalete de oro y brillantes, que con el equipo de la novia, confeccionada por la casa Jaumar han estado expuestos en casa de la misma que como es sabido habita un piso de la genial mansión construida por Gaudí en el Paseo de Gracia, vis a vis del en que mora los desposados, el cual ha sido alhajado con gusto y riqueza. "

Como señala la nota, al volver del viaje de bodas el matrimonio se instaló en el piso primero de la planta tercera de la escala del Paseo de Gracia del inmueble. En el piso de al lado ya se habían mudado los padres de la novia, Joaquín Durán y Mª Luisa Clarà. En ese momento la Casa Milà era muy codiciada por la alta burguesía barcelonesa, para establecer su residencia.

En 1914 nació en La Pedrera la primera hija del matrimonio Abadal Durán, María Luisa, y en 1916 el segundo hijo, Francisco.

Los seis vivieron en la Casa Milà hasta principios del 1930, año en el que inauguraron su nueva residencia, el Palacete Abadal, en la confluencia de la Diagonal con la calle del Capitán Arenas, que fue diseñado por el arquitecto Adolf Florensa (1889 a 1968).

Francisco Abadal Serramalera murió en Barcelona el 17 de diciembre de 1939.